El Puerto El Bluff, se encuentra ubicado en el municipio de Bluefields, exactamente a 15 minutos vía acuática, donde habitan alrededor de 6, 800 personas de las etnias creoles, mestizos y miskitus, con más de 700 viviendas.
En la década de los 60, hasta los 80, El Bluff fue el principal lugar que inyectó un desarrollo económico en el Caribe Sur de Nicaragua, con las empresas pesqueras que existieron en su momento, luego de los 80 la población inició a sufrir la escases de empleos, pobreza extrema y tuvieron que buscar alternativas para poder subsistir.
En la actualidad los areneros de Bluefields, extraen la arena de El Bluff de manera irracional, sin dejar ningún beneficio a esa comunidad, pese a que la alcaldía autoriza los permisos, no controlan la explotación y eso ha provocado que el agua del mar se meta a los negocios que están en la playa, de los cuales varias familias blufeñas decidieron emprender para poder tener ingresos económicos y además ofertar El Bluff, como un destino turístico, no obstante en la época de verano es cuando mayor afluencia de turistas locales, nacionales y extranjeros visitan esas playas.
La pesca y las remesas son las principales fuentes que permiten la subsistencia de la población de El Bluff
Dumar Quiróz, coordinador del Gabinete de la Familia en esa localidad, lamentó que se haya acabado la pesca industrial, ya que las empresas Casa Cruz, Bud Company, Pez Casa, Oceanic y Sea Service cerraron operaciones y eso generó un alto nivel de desempleo en El Bluff y Bluefields.
“Solo en las empresas maquiladoras habían más de 600 manos de obra, Bluefields contaba con un 70% de trabajadores, mucha gente venía de otros departamentos o del norte en busca de una oportunidad laboral, porque El Bluff era la matriz del empleo en la región, aquí soñamos con tener empleos formales y que la economía se levante, de lo que viven las familias es de la pesca, remesas y muy pocos que trabajan en instituciones; lo que quedó de la empresa Oceanic, fue donado a la comunidad, pero no se respetó eso y solo se dejó la mínima parte de las chatarras a la población, nuestra esperanza es la construcción del Puerto de Aguas Profundas, donde se prevé que en nuestro puerto hagan un astillero”, concluyó el representante político.
Actividad turística se mantiene baja desde la pandemia del Covid19
Juliana Contreras, es dueña de Rancho “El Pelón”, uno de los tantos sitios de recreación que se edificaron frente al mar y que ha sido una de las iniciativas de la población que carece de empleos; con la pandemia del covid los empresarios blufeños se han visto afectados, porque muy poca gente ha llegado a las playas desde que inició la pandemia.
De vez en cuando vienen grupos de gente, pero no a como venían antes del 2020, la economía está muy baja, muchos tienen que irse del país para poder enviar dinero a sus familias, en aquellos años cuando estaban las empresas pesqueras vivíamos mucho mejor, pero luego que quebraron se vino la pobreza, dijo la empresaria.
Gobiernos han mantenido a El Bluff en el olvido
El poblador Domingo Mayorga Cruz, considera que la mayor necesidad que tienen es la de empleos “yo soy pescador, pero para guardar mi producto tengo que buscar hielo y venderlo en Bluefields, aquí se requiere un acopio, para que las familias puedan vender el marisco, algunas familias hacen dos o un tiempo de comida cuando mucho, los diferentes Gobiernos no han tenido olvidados, no se preocupan por nosotros, no buscan proyectos para El Bluff”, resaltó el pescador.